El mundo de las letras...

Mundo que es mi mundo, mundo en el que sueño y vivo, muero y resucito

viernes, 20 de enero de 2012

El gaditano y el Efecto Espectador

Hoy quiero hacer mención a un fenómeno al que algunos investigadores americanos allá por los años 70 denominaron el efecto espectador. Tal espectacular denominación se dio al hallazgo sorprendente de que la mera presencia de otras personas inhibe nuestro propio comportamiento ante situaciones injustas o de emergencia… La explicación más común de este fenómeno es que, con otros presentes, los observadores asumen que otro intervendrá y todos se abstienen de hacerlo. El grupo hace que se difumine la responsabilidad. Hasta aquí todo bien, pero ¿por que citar tal concepto en este espacio?

Porque tal fenómeno se ha instaurado e incrustado en las murallas de mi tierra, de mi casa. Un extraño virus ha llenado de la normalidad más vulgar a un pueblo que cuan diferente siempre se mostró. Un pueblo que se caracterizó por su lucha incansable por lo propio ha quedado adormecido en la inmunda telaraña de la desidia y el conformismo. Orgulloso por la idiosincrasia heredada y ensimismado entre risas y coplas. Tal reconversión, deconstrucción o transformación bien puede quedar explicada si agregamos a este escrito un nuevo término psicológico: la indefensión aprendida, concepto este que podríamos resumir “grosso modo” con la sensación de que “por mucho que se haga, el cambio no depende de nosotros”. Y en esas estamos, entre dos conceptos que marcan el devenir de un pueblo que se apaga entre ráfagas de ilusión venidas de la mano de aquellos que recuperaron y “okuparon” Valcárcel y repentinos apagones en forma de desalojo y cierre.

Y el pueblo observa esperando una intervención que no llega (efecto espectador) y el pueblo baja los brazos porque siente que por mucho que haga no se vislumbra esperanza alguna (indefensión aprendida).

¿Esperamos un “mesías” tal vez? , ¿una solución divina?, ¿una revolución armada?... la cuestión es que Cádiz se apaga y solo el legado carnavalesco persiste. Motivación, ilusión, autoestima, creatividad…conceptos que pasean por nuestras calles y se encuentran como en casa a finales de enero y durante todo un mes de febrero. Esperemos se instauren definitivamente en aras de un crecimiento que se hace esperar, en aras de un tercer puente a la esperanza que esperamos cruzar…

No he dicho, he comentado…

Hasta pronto